No lo sabemos al cierto. Si tu embarazo ya ha pasado de la fecha prevista para el nacimiento, escucharás miles de recomendaciones y sugerencias para tratar de acelerar la llegada del bebé. El problema es que, en realidad, hay muy poca o ninguna evidencia de que estas técnicas funcionen.
Por otro lado, si tú y tu bebé gozan de buena salud y estás cansada de esperar, hay algunos métodos naturales que puedes probar para intentar desencadenar el parto.
Antes de usarlos pídele consejo a tu doctor, especialmente si tienes algún problema médico o si están considerando inducirte el parto por razones médicas.
Usar hierbas
En nuestra cultura es muy común el uso de hierbas y remedios caseros y hay algunas, como el té de hoja de frambuesa, que pueden inducir el parto. Pero antes de probarlas debes hablar con tu doctor, ya que estas hierbas pueden tener efectos muy dañinos sobre el bebé.
A veces las contracciones que causan son muy fuertes y esto puede repercutir sobre el ritmo cardiaco del bebé. Por otra parte, las hierbas también podrían interferir con algunas de las medicaciones que te den durante el parto.
Ten en cuenta, además, que las hierbas no están sometidas a ninguna regulación gubernamental, por lo cual aunque en un frasco de píldoras hechas con hierbas diga que una cápsula contiene 50 mg, por ejemplo, no hay forma de comprobar si eso es cierto.
Por todo esto es importante que tu doctor te dé su aprobación y te explique muy precisamente cómo podrías usar este té, si es que puedes usarlo.
Hacer el amor
Tener relaciones sexuales o tener un orgasmo puede estimular la producción de la hormona oxitocina. La oxitocina es la hormona del amor, de las contracciones y la lactancia, y su liberación puede aumentar la frecuencia de las contracciones Braxton-Hicks o incluso estimular naturalmente el comienzo del parto.
Además de la liberación de oxitocina durante el acto sexual, el semen contiene unas sustancias llamadas prostaglandinas, que pueden ayudar a madurar o ablandar el cuello del útero haciendo que esté listo para dilatarse cuando comiencen las contracciones del parto.
Tener relaciones sexuales podría ser una forma divertida de iniciar al parto. Sin embargo, los estudios aún no han comprobado que efectivamente funcione. Muchas parejas tienen relaciones durante el embarazo sin que esto provoque el parto, ni siquiera al final del embarazo. ¡Aunque hacer el amor si te ayudará a distraerte mientras esperas!
Si crees que ya has roto aguas (la fuente o bolsa) no tengas relaciones sexuales, porque hacerlo puede aumentar el riesgo de infecciones. Llama a tu médico o al sector de maternidad de tu hospital si piensas que has roto la fuente y el trabajo de parto no empieza.
Estimular los pezones
Una alternativa a la actividad sexual es frotar o masajearse los pezones. Esto puede provocar contracciones, probablemente debido a la liberación de oxitocina. No hay acuerdo acerca de cuánta estimulación en el pezón se necesita, o con qué frecuencia se debe hacer, para provocar contracciones.
Hay estudios en que las mujeres tenían que estimularse los senos durante una hora, tres veces al día, alternándose los pechos cada 10 a 15 minutos. Mientras que en otros estudios se les instruyó que se estimularan los pechos solo una hora al día, durante tres días. En ambos casos, se requirió bastante tiempo de estimulación. Estos estudios hallaron algunas evidencias de que estimular los pezones sí ayuda a desencadenar el trabajo de parto, pero la técnica probablemente solo resultará exitosa si el cuello del útero ya se ha madurado y está listo para dilatarse.
Caminar
Mantenerse activa y caminar es algo que a menudo se aconseja para activar el parto. Parece ser que la presión de la cabeza del bebé contra el cuello del útero estimula la liberación de prostaglandinas, que ayudan a madurar el cuello uterino, lo cual podría desencadenar el parto. Si el bebé no se ha "encajado" en la pelvis o todavía está en una posición muy alta, las caminatas lo pueden ayudar a ubicarse en una mejor posición,y aumentar así las posibilidades de que el parto comience por sí solo.
Terapias alternativas
Algunas mujeres optan por terapias alternativas para intentar estimular el parto. Hay algunas evidencias de que la acupuntura puede ayudar a madurar el cuello de la matriz, pero otros métodos como la homeopatía no se han investigado lo suficiente y se desconoce su eficacia. Si decides probar alguna terapia alternativa, asegúrate de elegir a un profesional cualificado y que tenga experiencia con mujeres embarazadas.
Los laxantes, como el aceite de ricino, estimulan los movimientos intestinales, pero no se recomiendan como forma de empezar el parto. Aunque en teoría, la estimulación de los intestinos provocaría contracciones, no hay ninguna evidencia de que esto realmente funcione. Otro motivo para evitarlo es que el aceite de ricino es muy desagradable de beber y provoca náuseas en la mayoría de las mujeres.
Comer platillos con curry es una alternativa mucho más sabrosa, y muchas mujeres garantizan que funciona, aunque no hay estudios que respalden esta afirmación. O puedes probar comer dátiles. En un estudio pequeño se halló que comer seis dátiles al día empezando cuatro semanas antes de la fecha prevista del parto podría ayudar a evitar la necesidad de una inducción.
Fuente:espanol.babycenter.com
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