El desarrollo cerebral se da por etapas. Si el niño es pequeño, este es mucho más acelerado. Los bebés nacen con ciertas funciones, pero las demás se generan con el tiempo.
“El 25 por ciento del desarrollo de todas las capacidades del cerebro se da, más o menos, en los primeros seis meses de vida. A los 2 años, el 50 por ciento. Entre los 2 y 4 años, el 80. A los 5 años se alcanza el 90 por ciento. Eso en el área motor; el lenguaje va un poco más tarde. El 90 por ciento se adquiere a los 7 años”, explica el neuropediatra Álvaro Izquierdo.
A los 3 años hay todo un manejo de las funciones motoras y sensoriales; el lenguaje tiene buena capacidad de estructuración. Todos los sentidos están en funcionamiento. Desarrolla el área motora gruesa y ciertas partes, muy básicas, de la motricidad fina. La parte social también en sus procesos de desarrollo, pero el juego ya es una función importante, afirma Óscar Utria Rodríguez, psicólogo y director de posgrados en neuropsicología de la Universidad de San Buenaventura en Bogotá.
LA IMPORTANCIA DE LA LECTURA Y EL LENGUAJE
A esta edad, es importante interactuar con los niños de la manera más exacta posible. Los pequeños son ‘esponjas’, y aunque a los 3 años aún no han desarrollado una estructura o gramática exacta, sí están entablando conversaciones y aprendiendo vocabulario.
Es importante que se trabaje con símbolos, dice el psicólogo Óscar Utria; el medio ambiente está lleno de imágenes y palabras completas.
Este proceso está muy relacionado con la lectura, pues es una actividad que permite simbolizar y aumentar el léxico.
Además, es un estímulo importante que hace que se creen imaginarios y deja ‘volar’ la imaginación del niño.
Se aconsejan los libros cortos, con muchas imágenes, y crear un hábito no forzado; también leerles antes de dormir, en espacios cortos y dejar ‘enganchado’ al niño al libro para que se motive a repetir la actividad al día siguiente.
¿CÓMO ESTIMULARLOS?
A través del juego. Entre más natural, mejor; no se aconsejan los elementos electrónicos. Hay que darles elementos que desarrollen la creatividad. Rompecabezas de pocas piezas, sacarlos al parque, darles la pelota, votarse por el rodadero, jugar en el pasamos con la ayuda de los papás, etc., aconseja el neuropediatra Álvaro Izquierdo. También se recomienda el juego de roles.
Para el psicólogo Óscar Utria casi todo lo que los papás hacen, sirve; desde hablarles, jugar y leer.
Aparte, dice, es importante que los niños reflexionen: “Si les damos todo, no va a haber creatividad. Antes cualquier actividad, hay que generarles inquietudes: ‘Qué harías’. ‘Qué piensas’. ‘Qué opinas de esto’. Y validarles las respuestas. También hay que facilitarles las cosas para que inventen y creen sin restricciones.
HABILIDADES
Según el neuropediatra Álvaro Izquierdo, estas son las principales destrezas que adquiere un niño a los 3 años:
Motricidad gruesa:
• Aprende a pedalear el triciclo o una bicicleta con ruedas laterales.
• Aprende a pelotear.
• Salta bien con los pies al mismo tiempo (como un conejo).
• Camina, sin dificultad, para atrás o sobre una línea recta.
Motricidad fina:
• Aprende a hacer la pinza trípode. Es coger el lápiz con los dedos: pulgar, medio e índice.
• Remeda una cruz, un triángulo.
• Dibuja bolitas de manera rudimentaria.
Lenguaje:
• Es vital que esté diciendo frases completas. El lenguaje debe ser comprensible en un 80 por ciento. Y llevar una conversación.
Social:
• Aprende a compartir la lonchera, los juegos, las actividades cuando está sentado en el piso.
“El 25 por ciento del desarrollo de todas las capacidades del cerebro se da, más o menos, en los primeros seis meses de vida. A los 2 años, el 50 por ciento. Entre los 2 y 4 años, el 80. A los 5 años se alcanza el 90 por ciento. Eso en el área motor; el lenguaje va un poco más tarde. El 90 por ciento se adquiere a los 7 años”, explica el neuropediatra Álvaro Izquierdo.
A los 3 años hay todo un manejo de las funciones motoras y sensoriales; el lenguaje tiene buena capacidad de estructuración. Todos los sentidos están en funcionamiento. Desarrolla el área motora gruesa y ciertas partes, muy básicas, de la motricidad fina. La parte social también en sus procesos de desarrollo, pero el juego ya es una función importante, afirma Óscar Utria Rodríguez, psicólogo y director de posgrados en neuropsicología de la Universidad de San Buenaventura en Bogotá.
LA IMPORTANCIA DE LA LECTURA Y EL LENGUAJE
A esta edad, es importante interactuar con los niños de la manera más exacta posible. Los pequeños son ‘esponjas’, y aunque a los 3 años aún no han desarrollado una estructura o gramática exacta, sí están entablando conversaciones y aprendiendo vocabulario.
Es importante que se trabaje con símbolos, dice el psicólogo Óscar Utria; el medio ambiente está lleno de imágenes y palabras completas.
Este proceso está muy relacionado con la lectura, pues es una actividad que permite simbolizar y aumentar el léxico.
Además, es un estímulo importante que hace que se creen imaginarios y deja ‘volar’ la imaginación del niño.
Se aconsejan los libros cortos, con muchas imágenes, y crear un hábito no forzado; también leerles antes de dormir, en espacios cortos y dejar ‘enganchado’ al niño al libro para que se motive a repetir la actividad al día siguiente.
¿CÓMO ESTIMULARLOS?
A través del juego. Entre más natural, mejor; no se aconsejan los elementos electrónicos. Hay que darles elementos que desarrollen la creatividad. Rompecabezas de pocas piezas, sacarlos al parque, darles la pelota, votarse por el rodadero, jugar en el pasamos con la ayuda de los papás, etc., aconseja el neuropediatra Álvaro Izquierdo. También se recomienda el juego de roles.
Para el psicólogo Óscar Utria casi todo lo que los papás hacen, sirve; desde hablarles, jugar y leer.
Aparte, dice, es importante que los niños reflexionen: “Si les damos todo, no va a haber creatividad. Antes cualquier actividad, hay que generarles inquietudes: ‘Qué harías’. ‘Qué piensas’. ‘Qué opinas de esto’. Y validarles las respuestas. También hay que facilitarles las cosas para que inventen y creen sin restricciones.
HABILIDADES
Según el neuropediatra Álvaro Izquierdo, estas son las principales destrezas que adquiere un niño a los 3 años:
Motricidad gruesa:
• Aprende a pedalear el triciclo o una bicicleta con ruedas laterales.
• Aprende a pelotear.
• Salta bien con los pies al mismo tiempo (como un conejo).
• Camina, sin dificultad, para atrás o sobre una línea recta.
Motricidad fina:
• Aprende a hacer la pinza trípode. Es coger el lápiz con los dedos: pulgar, medio e índice.
• Remeda una cruz, un triángulo.
• Dibuja bolitas de manera rudimentaria.
Lenguaje:
• Es vital que esté diciendo frases completas. El lenguaje debe ser comprensible en un 80 por ciento. Y llevar una conversación.
Social:
• Aprende a compartir la lonchera, los juegos, las actividades cuando está sentado en el piso.
Fuente: http://www.abcdelbebe.com
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